La tarea de elegir café para tu cafetera
Ya tienes la cafetera, y ahora te preguntarás…. ¿qué café elegir para la cafetera?. Una tarea que no siempre es fácil.
En este artículo te mostramos unas pautas a tener en cuenta para la elección del café.
Fíjate en la fecha de tueste del café
Siempre insistimos, y no nos cansamos, que hay que fijarse en la fecha de tueste, que no se ha de confundir con la fecha de consumo preferente.
Y es porque tienes que primar que el café que compras es de tueste reciente.
Por tueste reciente entendemos un café que tiene una fecha de tueste inferior a treinta días.
¿Y por qué? Te preguntarás.
Te lo explico, de una manera que lo vas a entender a la primera.
La estructura del café está formada por centenares de esencias aromáticas que constituyen su valor organoléptico. Estas esencias volátiles van desapareciendo conforme transcurre el tiempo.
Un café bien tostado y de reciente tueste, eleva las características de la taza.
No es que tengas que consumir el café inmediatamente después de ser tostado. No, porque el café precisa, una vez tostado, en torno a 48h- 72h de reposo.
Pero sí, que para disfrutar de su gama de matices en plenitud, el café tostado hay que comprarlo fresco.
Elegir café ¿en grano o molido?
Si cuentas con un buen molino ( de muelas y no de cuchillas), merece la pena comprarlo en grano y molerlo justo en el instante antes de elaborar el café.
En caso que necesites adquirirlo molido ( es preferible, esta opción, si no cuentas con un molino adecuado ), ten en cuenta dos cosas:
1.- Solicita que te muelan el café en el momento que lo adquieres.
De esta manera, vas a conseguir mitigar la degradación que sufre el café a partir de la molienda.
2.- Indica el tipo de cafetera en el que vas a elaborar el café, para que te lo muelan con la graduación adecuada.
Fundamental, para que la extracción de los compuestos solubles del café sean extraídos correctamente.
¿Tueste natural o torrefacto?
Por situarnos y aclarar un concepto que puede generar confusión.
A la acción de tostar el café se la llama torrefactar. Por lo que todo el café que ha sido tostado ha sido torrefactado.
Sin ir más lejos, vas a encontrar en otros países el término ” café torrefactado” en lugar de ” café tostado”.
En España, se da una particularidad y es que al café que se le ha añadido azúcar durante el proceso de tueste se le denomina “café torrefacto”.
Por el contrario, aquel café al que no se le ha adicionado azúcar en el desarrollo del tueste, se le denomina “café natural” o “café de tueste natural”.
El café de tueste torrefacto que se encuentra en España es de una calidad muy baja; dañino para la salud y no representa la esencia del café.
Este producto lo vas a reconocer porque tiene un color negro y el grano es brillante. La carbonización de los azúcares le imprime un tono oscuro en taza y un sabor muy fuerte, que es apreciado por algunos consumidores.
El café de tueste natural, si ha seguido un proceso de tueste adecuado y está fresco, va a mostrar el carácter propio del grano.
Pero si el café de tueste natural ha sido tostado en exceso, o se ha utilizado una materia prima de baja calidad, este puede ser igual de nocivo que un torrefacto.
Además, a la hora de elegir café para tu cafetera, tienes que evitar comprar cafés que tengan un tueste excesivo pues los aceites que desprende el café, con el tiempo, acortan la vida útil de la cafetera.
Sabiendo estas tres claves básicas, ahora sólo te queda decidirte por aquel café que te guste más.
Como habrás visto, elegir café para tu cafetera no es una tarea siempre fácil.